viernes, 21 de noviembre de 2014

Los Bunkers, "El Necio" (Silvio Rodríguez)


Yo no sé lo que es el destino/ caminando fui lo que fui

Son de Concepción. Rockers chilenos, herederos del lugar que dejaron libre Los Tres. Como ellos, partieron del rock más clásico, de jopo y campera de cuero, para irse abriendo a otras influencias, más contemporáneas y también más propias. Hace un par de años, ya consagrados, instalados en Mexico, el mercado curiosamente casi natural en el que terminan los grupos chilenos que buscan proyección internacional –el eje del pacífico, en contraposición al rioplatense--,  Los Bunkers editaron Música libre, su sexto opus, un extraordinario álbum de covers rockeros de Silvio Rodríguez, que se convirtió –leo por ahí—en el disco más vendido en formato físico durante este siglo en Chile. Al parecer, como sucedió en su momento por aquí en la época del Clandestino de Manu Chao, todos los hogares chilenos con un equipo de música deben tener un ejemplar de Música libre, algo que bien podría haber sucedido de este lado de la cordillera si a alguien se le hubiese ocurrido editarlo. Al menos, al juzgar por la reacción en el auto de regreso de un fin de semana de campo, al poner play con el disco encontrado en una guantera ajena. Cantamos todos los temas hasta cruzar la General Paz, sin prejuicios y sin vergüenza. Después de todo, en las guitarreadas de la época en que Silvio Rodríguez y Pablo Milanés llenaban uno Obras tras otro, sus temas se mezclaban con los de Baglietto o Sui Generis casi sin distinciones. Siempre disfruté más de Silvio que de Pablo, debo confesar. Con el tiempo descubrí que Milanés es como nuestro Motown. Y Silvio, claro, es el gran compositor. Sus canciones, como las de Billy Bragg, son excelsas tanto al momento de confesar las debilidades, como cuando llega el momento de trazar una línea y esgrimir un puño cerrado. Además, las que no envejecen, sonarán actuales para siempre. Para darme un rinconcito en sus altares/ me vienen a convidar a arrepentirme/ me vienen a convidar a que no pierda/ me vienen a convidar a indefinirme/ me vienen a convidar a tanta mierda, la rockean Los Bunkers, y suena como escrito ayer. Acá, bajo la lluvia, a un play de distancia. Y también casi al final del Música Cretina de esta semana, ya en retirada.

No hay comentarios:

Publicar un comentario